Eso es lo que pareciera estar sucediendo en vísperas no sólo de las festividades navideñas, sino también del año electoral. Según trascendió el fin de semana, diputados del partido de gobierno y del izquierdista Frente Amplio empeñaron su palabra al colectivo sindical Patria Justa -del que forman parte- en el sentido de que el proyecto que pretende regular el empleo público, será desprovisto de sustancia. O como se dice popularmente "de dientes".
Para lograrlo, al parecer, el bloque PAC-FA está en plena negociación de mociones con la bancada liberacionista. Se dice que los verdiblancos (sino todos, al menos una buena parte de la fracción) quieren ganar simpatías de los sindicatos y con tal de lograrlo estarían dispuestos a flexibilizar el proyecto que pretende llevar a 2,54% las anualidades del sector público y que además establece tope de acho años de cesantía para toda la administración.
Ingenuamente la idea sería aprobar un proyecto de empleo público inocuo para luego darle trámite al proyecto que transformaría el impuesto de ventas en impuesto al valor agregado. Eso, por supuesto, siempre y cuando se lograra articular una mayoría de 38 legisladores para avanzar con lo que vaya quedando de la agenda fiscal.
¿Qué pasa si el proyecto queda disminuido? ¿Donde está el riesgo de no hacer estos cambios? ¿Qué opinará el Ejecutivo de la negociación en curso que adelantan sus diputados de confianza para disminuirle efectividad real al proyecto de empleo público? Acerca de éstas y otras interrogantes, conversamos con el diputado y economista, Ottón Solís Fallas en Hablando Claro.
Escuche aquí este programa...
